Cole borroca: ¡¡¡Cara de pedo!!! |
Desde la
tarde de ayer varias decenas de niños se encuentran amotinados en los Jardines
de Pereda a modo de protesta por la vuelta a las clases. Declaran que el cole
es un rollo y que quieren seguir jugando
para siempre con sus amigos en el parque.
Todo empezó
cuando un grupo de chavalucos de 3 a 7 años estaban pasándoselo muy bien
jugando a polis y cacos hasta que llegó la hora de irse a casa. Los niños
hicieron caso omiso de las órdenes de sus padres y reclamaron su derecho a
hacer lo que les diera la gana. La tensión fue creciendo ante las amenazas paternas de
que les iban a dejar “allí solos” unido a que ya por la tarde habían estado
molestando con que se pusieran la chaquetita y que pronto se les acabaría el
chollo porque tendrían que volver al cole.
¿Sabes quien va a ir al cole? |
Estos
últimos comentarios fueron los que dieron al traste con las negociaciones y el
origen de la ya conocida como “Rebelión de los chupetes”.
Las fuerzas
de orden público no pueden acercarse a los infantes ya que son recibidos con
escupitajos e insultos como “cara de pedo” o “tienes arena en la vagina”
seguidos de trinchantes risas. Imágenes vía satélite señalan que podrían estar
fabricando biberones molotov y bombas sucias hechas con caca.
Es una
incógnita aún como han podido sobrevivir solos toda la noche. Las sospechas
recaen sobre los abuelos de los críos, que han podido estar llevándoles chuches
y refrescos a escondidas. Este hecho ha sido rotundamente negado por los yayos “como
de costumbre”.
Su lider Pablito ha convocado manifestaciones en todas las localidades cántabras en contra
de la vuelta al cole. En las paredes de los pasillos de varias casas se pueden
ver pintados con rotus de colores lemas como “Podeis quitarme el chupete pero
nunca la libertad”, “Mariano cámbiame el pañal” o “Mejor tener el culo cagao
que ir al cole”. Al final del día se hará una quema simbólica de los babys y
libros recién comprados como protesta.
Pintada anónima en un hogar cántabro |
Por otro
lado la delegación del gobierno avisa
que tras la nueva ley de seguridad ciudadana a los más traviesos les podrían caer
condenas de 20 a 40 años de cárcel y la confiscación perpetua de la paga.
Seguiremos
informando aunque sea cada seis meses.